La era vampiro

Por: Jose Camero

Primero tenemos que especificar que la era vampiro ataca un 85% a los adolecentes comprendidos entre las edades de 11 a 18 años ya que a la mayoría de los adultos la convierten en una simple y sencilla rutina.

Sabemos que estamos dentro de la era vampiro cuando empezamos a dormir más de día y a mantenernos despiertos toda la noche sin importar que tengamos compromisos para el día siguiente.

Pudiéramos echarle la culpa a la tecnología, porque es gracias a ésta, que el habito de dormir temprano o a las horas correspondientes se va perdiendo, empezamos a dormir menos hablando con otras personas, navegando en internet, jugando videojuegos, hablando por mensajes de texto etc. etc. etc.

Tiempo al tiempo.

Por: Ángela Lugo.

“Hola. ¿Cómo estas? TIEMPO sin verte.” “Ángela, vamos. No hay TIEMPO.” “Bachilleres, el examen será el sábado en la mañana porque ya no tenemos TIEMPO.” “¿Qué hacemos? Aún tenemos mucho TIEMPO.” 

   La Real Academia Española define tiempo como “magnitud física que permite ordenar la secuencia de los sucesos, estableciendo un pasado, un presente y un futuro”. Puede que una corta definición ayude a establecer una idea de uno de los conceptos usados con más frecuencia, a lo que el resto le atribuimos diversas características y efectos sobre gran parte de los elementos que conforman nuestro día a día y vida en general.  El tiempo es eterno, de eso no hay duda. Pero ¿cual es tu tiempo de disfrutar del mismo?

Voluntad: Poder sin límites.

Por: Mabel Giraldo.

     Caminando uno de estos días, me encontré por la calle  a un hombre dibujando.  Sus dibujos no eran nada semejante a bocetos de grandes y reconocidos artistas. No será jamás un Picasso o un Da Vinci. Sus obras nunca serán expuestas, pero definitivamente estarán en el museo de mi memoria y quizás en el de miles de personas que circulan todos los días las calles de South Beach. Sus brazos son tan débiles y pequeños que apenas se notan. Una malformación genética le impide usar sus manos. Dibuja con los pies. ¡Me encanta! ¡Su voluntad no tiene límites!  Pero su caso no es único. Lo acompañan cientos en todo el mundo que a causa de accidentes, enfermedades o causas genéticas  no tienen brazos, ni manos, ni pies, no escuchan, no ven, pero eso no los detiene para cumplir sus sueños y acariciar lo hermoso de estar vivo.

Caracas, ciudad de despedidas.

Por: Victor Rodríguez

El documental expone la realidad que viven un grupo de jóvenes de clase media alta de Caracas, donde todos los entrevistados concuerdan que la mejor solución es irse del país por todos los problemas políticos, económicos y de inseguridad que se viven en él.

No tengo tiempo para eso.

Por: Jhensy Lucena.

     Todos aquellos que nunca  han dicho (por lo menos una vez): “no tengo tiempo para hacer eso” que detenga ahora mismo esta lectura.

     Hace aproximadamente 3 semanas estuve hablando con un amigo.  Le preguntaba si él había logrado todos sus sueños. Él se quedo callado por un corto momento y dijo que no, que no había logrado todo lo que había soñado pero que no se arrepentía de las cosas que había hecho y de todo lo que había alcanzado durante sus 50 años de vida.

La única condición: incluirlos.

Por: Mariana Miranda.

     Imaginemos un grupo de niños en un parque, jugando. Pensemos que todos se conocen porque viven en el mismo sector y tienen edades aproximadas que estudian los primeros grados de primaria: ¿Qué vamos a observar? Que todos o la mayoría de los niños se agrupan de acuerdo a sus preferencias, interactuando de manera espontánea entre ellos. Observamos, además, que siempre existirá uno o dos niños que son el centro de atracción y hacia donde se dirigen todos los demás los seguirán, cumpliendo un papel de líder o imán de acuerdo a su simpatía con el grupo. Eso siempre será así. Sin embargo, se podría dar el caso de que exista un niño alejado del grupo, desincorporado, que no muestra ningún tipo de interés por incorporarse, dando muestras de aislamiento, como ensimismado, viviendo en su propio mundo interior.

Esto no es otro típico escrito sobre el amor.

Por: María Guevara.

     El ser joven y más, un adolescente, representa estar inmerso en un mundo de ventanas abiertas, posibilidades, misterios y sobre todo: decisiones. Decisiones que para bien o para mal nos vemos en la obligación de tomar en esa etapa de la vida, donde debido a los cambios, tanto físicos, orgánicos y emocionales, a los que nos vemos sometidos, solemos llegar a ser algo volátiles y hasta a veces inconsistentes en nuestras decisiones, lo que muchas veces puede dar pie a que seamos juzgados y subestimados, solo por esa condición, el ser jóvenes.